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Según se desprende de un estudio reciente publicado en Diabetes Care, las hijas de mujeres que hayan sufrido diabetes gestacional, podrían presentar un riesgo más elevado de sufrir obesidad durante su adolescencia, en concreto, tendría 3,5 veces más probabilidades de tener sobrepeso en la adolescencia que aquellas cuyas madres que no sufrieron de diabetes gestacional. Asimismo, las probabilidades aumentaban hasta en 5.5 veces, si sus madres habían padecido diabetes gestacional y tenían sobrepeso antes del embarazo. Además, también eran más propensas a tener unas cantidades más elevadas de grasa corporal, así como de obesidad abdominal, según los investigadores.
La investigación a la que hace referencia incluyó a más de 400 niñas a quienes se dio seguimiento durante 6 años, con visitas anuales para controlar su estatura, peso, grasa corporal y obesidad abdominal.
Por lo tanto, los hallazgos vienen a sugerir que lograr que las mujeres controlen su peso y mejoren su estilo de vida antes del embarazo podría ayudar a reducir el riesgo de obesidad de sus hijos, afirmaron los investigadores.
Via fedesp.es
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